‘Yo no soy de Madrid’ es mi historia, pero puede ser la de cualquiera. La historia nace del miedo de dejar de sentir cuál es tu hogar, de dejar de sentir quién es tu familia y de dejar de sentir quién eres. No es que cada uno sea de dónde pertenece, pero puede que sí su historia.

Hoy en día somos muchos los que hemos dejado atrás, viajado o huido de nuestra casa para intentar ser alguien. Un alguien que no sabe quién puede llegar a ser, pero, al fin y al cabo, un alguien. Hemos buscado libertad, hemos buscado trabajo, hemos buscado estabilidad, hemos buscado belleza y hemos buscado amor o, mejor dicho, paz. ¿Pero eso existe? ¿Quién nos lo asegura?

La protagonista vive con los miedos de olvidar quién es y de que la olviden. Su mayor miedo es dejar de sentir que pertenece a una hogar, porque en ese momento, no va a saber quién es. Y ahí, lo único que ella sabe, es que va a querer ese abrazo que tanto echa de menos en Madrid. Es amargo, pero sabe que en algún momento ese abrazo no va a estar. Y puede que ahí sepa que su verdadero hogar y tierra es ese abrazo. Pero ya te digo, esta historia puede ser la de cualquiera.